Hozier emociona bajo la lluvia en Lollapalooza

El cantautor irlandés ofreció un set espiritual y comprometido en su regreso a Grant Park

Foto: Ashley Osborn/Lollapalooza

El cielo de Chicago sirvió de telón perfecto para una de las presentaciones más emotivas del primer día de Lollapalooza 2024. Bajo una lluvia ligera que caía al ritmo del folk-soul que lo caracteriza, Hozier subió al escenario con la serenidad de un poeta y la fuerza de un predicador.

“Gracias por esta lluvia, me hace sentir como en casa”, comentó con una sonrisa el cantautor irlandés, quien regresó al festival por tercera vez, esta vez con un lugar protagónico más que merecido. El público respondió con una asistencia masiva, demostrando que, en medio de tanta diversidad sonora, siempre hay espacio para el poder de la palabra, la música y la emoción.

Desde los primeros acordes de “Eat Your Young”, Hozier se adueñó del ambiente con su inconfundible timbre de voz y un repertorio que mezcló la melancolía con el activismo. “Nina Cried Power”, que rindió homenaje a Mavis Staples y los movimientos por los derechos civiles, fue uno de los momentos más intensos de la noche, potenciado por un mensaje en favor del alto al fuego en Gaza. “No importa de dónde vengas o quién seas… ningún ser humano debería vivir el terror que hemos visto”, expresó con solemnidad.

El set también incluyó el debut en vivo de “Nobody’s Soldier” y joyas como “Work Song”, “From Eden” y “Cherry Wine”, cada una interpretada con un respeto casi reverencial por sus letras. Acompañado de una banda que incluía cuerdas, coristas y percusión, la experiencia se sintió más como una misa moderna que como un simple concierto.

La culminación llegó con “Take Me to Church”, coreada por miles bajo la lluvia en un cierre catártico que unió a todos en una sola voz. Con su mezcla de poesía, convicción y talento, Hozier confirmó que sigue siendo uno de los artistas más necesarios de esta generación.