FLO conquista con carisma su debut en Lollapalooza

El trío británico superó fallas técnicas y prendió al público con R&B y covers icónicos

Foto: Pooneh Ghana/Lollapalooza

El debut de FLO en Lollapalooza no comenzó de la mejor manera. Las tres integrantes del grupo británico salieron al escenario del Bud Light Stage listas para mostrar su propuesta de R&B moderno con alma retro, pero los micrófonos simplemente no funcionaban. Ni en “Not My Job” ni en “Control Freak” se escuchaban las voces en vivo, lo que generó desconcierto y miradas de frustración.

Afortunadamente, el problema se resolvió a tiempo y las artistas recuperaron terreno con “Summertime” y “Caught Up”, comenzando a conectar con un público que, aunque inicialmente disperso, empezó a corear y moverse con las armonías suaves y coreografías precisas del grupo.

Formado por Stella, Jorja y Renée, FLO ha sido considerado por muchos como una de las promesas más sólidas del R&B británico actual, una afirmación que reforzaron en Chicago con una mezcla de temas propios —como “Immature” y “Feature Me”— y poderosos covers de clásicos femeninos como “Don’t Let Go” de En Vogue y “Bootylicious” de Destiny’s Child, que causaron euforia.

El trío mantuvo un alto nivel de energía y estilo, intercalando coreografías y looks perfectamente coordinados, sin perder nunca la sonrisa ni el agradecimiento hacia la audiencia. “Gracias por la paciencia, Lolla”, dijeron en un momento, reconociendo el tropiezo inicial con simpatía.

El cierre llegó con su primer éxito viral, “Cardboard Box”, seguido de la reproducción grabada de “Check”, dejando claro que, pese a los altibajos técnicos, FLO sabe cómo dejar una buena impresión en una primera cita.